El profe - Miranda

De este grupo argentino ha venido sonando en diferentes radios limeñas la canción Don. Hoy vamos con otra que me parece genial. A mí me recuerda a Humbert Humbert y Lolita.

Pueden visitar su página web y su blog.

Cuidado con sus bajos instintos!!!

El profe:

Yo sé que nunca te lo dije así.

A veces canto sólo para mí
sólo quisiera que me oigas ahora que sigo mi instinto

El instinto animal no fallará
quisiera hablarte
pero sin hablar.

Yo sé que puedo hacer que tú me comprendas
si sigues mi juego

Yo quiero ser tu profe
mejor dicho profesor
el que te enseñe del amor
lo que sabes y disimulas.

Quisiera que me mientas cuando pregunte tu edad
quiero volverme tan vulgar
voy a engañarte tonta
sólo para tocarte un poco!

Ya ves así nunca sabrás de mí
mi fantasía me describe así
esta es la parte que no ha visto nadie
y que tú ahora conoces
es que te veo y es mi reacción
el pretender tener todo el control
aprovecharme de ti me estimula
apuntarte mis trucos

Percibo en que momento te comienzas a mojar
y entonces no puedo parar
hasta sentir que te hago mía

En el papel de ingenua
tú te luces de verdad
y yo comienzo a sospechar
que eres mi alumna preferida
y que caíste en mi trampa.

Quiero ser tu profesor
quiero ser tu profesor.

Yo quiero ser tu negro del camión
yo quiero ser un cerdo picarón
yo quiero hacerte las cosas más sucias de un modo elegante

Yo quiero que te toques para mí
quiero tocarme y acabar en ti
ay si supieras como me emociona el sólo pensarlo.

Quisiera que me mientas cuando pregunte tu edad
quiero volverme tan vulgar
voy a engañarte tonta
sólo para tocarte un poco!

Quiero ser
tu profesor
quiero ser
tu profesor

quiero ser
tu profesor

aja

quiero ser
tu profesor...

Comentarios

Anónimo dijo…
me encanta esta canción, sería feliz si mi profe me la dedicara
Anónimo dijo…
*
*
*
**AYYY! ESE TEMA ESTÁ RE COPADOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
AGUANTE MIRANDA! LOCOOO!!

ALE SERGI T AMOH!**

*
*
*

CANCIONES POPULARES

Amnesia - José José

Entre sábanas blancas - Costa Brava

La noche más linda del mundo - Adalberto Santiago